Marvel Studios sigue adelante con su Universo Cinematográfico y ahora nos presenta Capitán América: Civil War, una película que han dicho es buenísima, excelente, soberbia y magnífica. Muchas veces es mejor formarse una opinión propia a dejarse influir por esto.
Esperaba mucho más de esta película y es que las cintas de Marvel ya se están convirtiendo en lo mismo. La mayoría son historias infantiles y aquí vemos a superhéroes comportándose como niños. Esto lo digo porque Iron Man/Tony Stark, un personaje que pareciera haber crecido durante la primera película de Avengers y después con Iron Man 3, aquí al parecer retrocedió hasta convertirse en un niño chillón y berrinchudo.
Toda la trama gira en torno a una misión que sale mal en cierta parte de África, hay gente muerta y etc, etc, y 172 países deciden ponerle un «hasta aquí» a los Avengers por medio de los «Tratados de Sokovia.» Estos básicamente establecen que los Avengers estarán regulados por las Naciones Unidas y sólo podrán actuar cuando ellos dicen, haciendo cachitos el propósito de ser superhéroes.
Tony Stark se pone de parte de esta petición porque… «motivos.» Realmente sólo lo acepta para que la trama siga adelante, pues la razón expuesta allí es sumamente ligera, débil y sin sentido. Aunque igual y propone una pregunta seria, ¿cuál es realmente el bien común? ¿Por una sola persona deberán de permitir que el mal triunfe?
El único personaje que siempre ha sido consistente en el Universo Marvel es El Capitán América y tal vez por eso es mi superhéroe favorito de esta saga de cintas. Es el único que realmente es virtuoso y con una visión real del mundo, pues sabe que los gobiernos y las agendas de estos siempre van a cambiar y puede llegar el punto en el que no les convenga que existan los Avengers.
Eso desata la escisión de los Avengers. Dos puntos de vista encontrados, uno respaldado por el niño consentido, rico y llorón representado por Tony Stark y otro representado por un verdadero héroe, Steve Rogers.
Pero… Resulta que hay un villano que está maquinando una serie de tácticas para perjudicar todo esto. Ese es el toque de genialidad de la película, aunque los motivos del personaje sean muy vacíos y sólo sirvan para sustentar que las dos facciones de Avengers luchen entre si.
La temática de Capitán América: Civil War gira en torno a la Venganza. El problema real es que en ningún momento se muestran las consecuencias de ejecutarla y eso es lo que mengua al personaje de Black Panther. Su único motivo dentro del filme es estar enojado y decir que se va a vengar. Ya cuando está por hacerlo, simplemente dice… Nah, mejor no.
Me queda claro que Marvel está jugando a la segura con todas estas películas y no vamos a ver nunca algo de relevancia. Por lo menos espero que el segundo estreno de este año que es Doctor Strange, intente modificar y transformar el Universo Marvel en algo mágico, porqué si sigue así… La verdad es que ya me está aburriendo.
De hecho para mi el punto más interesante de la cinta fue la aparición de Ant-Man, realmente le dio un respiro a la cinta. El nuevo Spider-Man es… patético. Escuchar la voz de un chamaquito y las bromas tontas que dice es insoportable. La nueva tía May es básicamente una zorra… Seguro le encantará a muchas personas.
Si te ha gustado todo lo que saca Marvel, definitivamente tienes que ver Capitán América: Civil War. Si esperas que los personajes hayan evolucionado y ahora veas una trama compleja, oscura y llena de lecciones que van más allá de «ser bueno es bueno,» definitivamente mejor espera a verla en formato casero.