Hell is us: La Odisea Existencialista (y no tan difícil) que no Sabías que Necesitabas
¡Atención, almas torturadas y gamers con ganas de un poco más deprimente realidad virtual! Si pensabas que tu vida ya era lo suficientemente un sinsentido existencialista, prepárate para sumergirte en «Hell is us», el videojuego que te recordará que sí, que el infierno somos nosotros… y que, curiosamente, vale la pena explorarlo. Olvídate de esos títulos genéricos que prometen aventuras épicas; aquí te prometemos una experiencia para perderte, aunque más bien sea para perder la fe en la humanidad, pero de una forma extrañamente divertida y con un toque de masoquismo digital.

Un Souls-like para Principiantes con Ganas de Sufrir (pero no tanto).
Vamos a ser sinceros desde el principio, para que nadie se lleve a engaños: «Hell is us» se autodenomina un «souls-like». Sí, ya sé lo que estás pensando: «¡Oh, no! ¡Más frustración, más morir cien veces contra el primer miniboss, más lanzar el mando por la ventana!» Pues sorpresa, sorpresa, amigos con manos de mantequilla y paciencia de mosca, la dificultad de este engendro virtual «no es tanta». ¿Qué significa eso en el idioma gamer? Que probablemente no sudarás la gota gorda como con otros titanes del género, pero tampoco será un paseo por el parque de las flores. Es como un «souls-like» con rueditas de aprendizaje, o para esos días en los que quieres sentirte un campeón sin realmente haber entrenado como tal. Es la excusa perfecta para decir en las reuniones sociales que juegas «souls-likes» sin la vergüenza de haberte atascado eternamente en el tutorial.

El escenario principal es una zona de guerra. Porque, ¿qué hay más reconfortante que escapar de tus problemas diarios para meterte en un conflicto armado virtual con elementos «perturbadores y existencialistas»? Es el tipo de juego que te hace sentir que la vida real no es tan mala, después de todo. ¿Tu jefe te estresó? ¿Las cuentas no cuadran? No te preocupes, en «Hell is us» tendrás criaturas grotescas y un conflicto armado que te hará pensar: «Al menos mi hipoteca no intenta arrancarme la cabeza».
16 Horas de Angustia (y Entretenimiento) Bien Dosificadas
En un mundo donde los juegos exigen 200 horas de tu vida (y aún así no te dejan ver el final), «Hell is us» te lanza un salvavidas de sensatez. Aproximadamente 16 horas. ¡Solo 16! Esto es perfecto para el jugador moderno, el que tiene un trabajo, una vida social (o al menos lo intenta) y no quiere casarse con un solo título durante meses. Es una duración ideal para sumergirte en su mundo, desentrañar sus misterios y sentir que has completado algo, sin que el juego se convierta en una segunda hipoteca emocional.

Es como un buen atracón de serie, pero interactivo. Suficientemente largo para sentir que has amortizado tu inversión, pero lo bastante corto para no caer en la monotonía, donde el juego se hace tan pesado que lo dejas a medias para siempre. Aquí, la promesa es una experiencia completa y concisa, aunque llena de esas reflexiones sobre la vida y la muerte que te dejarán con ganas de un buen baño caliente y quizás un psicólogo virtual.
Un Universo que Grita «Secuela, Por Favor» (y DLCs, ¡claro!)
Uno de los puntos más elogiados es su universo. Y no es para menos. Si un juego te deja con ganas de más, es que ha hecho algo bien. Aquí, los elementos perturbadores y existencialistas no son solo una fachada, sino que se integran en una mitología que tiene el potencial de expandirse más allá de este primer título. Y sí, esto significa lo que estás pensando: ¡prepara tu cartera! Porque si los desarrolladores son listos (y apostamos a que sí), esto no será el final.
Podríamos estar ante el nacimiento de una saga. Más zonas de guerra, más bichos existencialistas, más razones para cuestionar nuestra propia existencia. Quizás un DLC donde exploras el origen de las criaturas, o una precuela sobre el inicio de la guerra. Las posibilidades son tan infinitas como los traumas que te dejará el juego. Y eso, amigos míos, es música para los oídos de cualquier editor de videojuegos: «¡Potencial de franquicia! ¡Más ingresos! ¡Que el capitalismo siga su curso!»
El punto débil es el combate, desafortunadamente. Aunque cuenta con la mecánica de llenar tu vida nuevamente si aprietas bien el botón, se torna aburrido después de un rato. Al igual… aunque me gustó el diseño de personajes, siento que podría haber sido más variado y meter muchos más enemigos distintos.
En resumen, «Hell is us» es la dosis perfecta de angustia existencial con un envoltorio de «souls-like» accesible. Es una experiencia que te invita a perderte, a cuestionarlo todo, y a darte cuenta de que, sí, el infierno podemos ser nosotros, pero al menos podemos jugarlo en 16 horas y con una dificultad que no te hará querer quemar la consola. Si buscas un juego que te remueva por dentro pero que no te haga llorar de frustración por la dificultad, y si además aprecias un universo que promete más (y más gasto), este es tu título. ¡Prepárate para la catarsis! Y quizás un poco de insomnio.
7/10. Recomendado.