Hay una realidad que no se puede negar: el sistema como tal está hecho para aplastar a las minorías y eliminarlas de la existencia. En Dallas Buyers Club vemos este tipo de historia desde la perspectiva de un protagonista que se la pasa viviendo la vida loca.
Tanto así que un buen día le detectan VIH y después SIDA, una enfermedad que en ese entonces era incurable. Dicen que hoy en día tampoco se puede curar pero que se controla… Igual y me estoy adhiriendo a las teorías conspiratorias más famosas, pero siento que tienen la cura para esta enfermedad y simplemente no la sueltan por una cuestión de dinero.
Los tratamientos contra el SIDA son sumamente caros y a la industria farmacéutica le conviene que la gente consuma por mucho tiempo esas medicinas, estamos hablando de un mercado millonario. Aquí en esta película se ve justamente eso y como la lucha personal de un solo hombre se transforma en la lucha de todos los enfermos de este desastroso padecimiento.
Todo comienza con el personaje de Matthew McConaughey, Ron Woodroof, que se contagia por ser de moral sumamente ligera. Eso lo lleva a mendigar por medicinas hasta que llega con un doctor en un poblado de México que le dice que el medicamento que tanto trabajo le ha costado conseguir en realidad lo está matando.
Obviamente Dallas Buyers Club es una crítica fuerte al sistema de la FDA, la máxima reguladora de alimentos y drogas en Estados Unidos. Aquí dejan ver que solo los corporativos tienen el poder en un mundo en el cual las personas simplemente son clientes y se deshecha el lado humano. Es algo asqueroso.
El punto es que todo esto ocurrió realmente, la FDA aprobó el uso de un medicamento que mataba a los pacientes… Obviamente nadie se quiere morir de una forma tan horrible y es ahí cuando con ayuda del doctor en México (un marginado porque sus ideas no le convenían al sistema) le consigue medicinas efectivas contra el SIDA a Ron.
Ron entonces ve la oportunidad de hacer negocio y es cuando crea el famoso Club de los Desahuciados, en el cual cobra una membresía mensual por dar medicamentos a los enfermos de SIDA. Lo interesante de la película es que Ron comienza siendo un ser sumamente egoísta y al final prácticamente se vuelve un defensor de la justicia y la verdad.
Las actuaciones son fabulosas, desde McConaughey que protagoniza, pasando por Jared Letto como un trasvesti, hasta Jennifer Garner una enfermera preocupada por sus pacientes y que se da cuenta de todo el problema con el sistema. Jean-Marc Vallée hizo un excelente trabajo de dirección.
Finalmente esta es una película que llama a tomar consciencia sobre una realidad fundamental: los funcionarios de gobierno, sean quienes sean, están a nuestro servicio. Del pueblo. Son nuestros servidores y deben de hacer aquello que les ordenemos pues nos están representando.
Desafortunadamente en el mundo lo único que gobierna son intereses económicos… Pero siempre se puede cambiar todo si verdaderamente te transformas desde el interior.
Vale la pena ver Dallas Buyers Club, no es una película que vería muchas veces pero es altamente reveladora y es recomendable.
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