Darren Aronofsky es un cineasta autor de sus películas. Eso quiere decir que nadie, absolutamente nadie le puede meter mano a sus películas. Ahora ha surgido preocupación por parte de Paramount porque su nuevo filme, Noah, no ha estado funcionando en las proyecciones de prueba que ha tenido.
Generalmente las películas de alto presupuesto (Noah ha costado $130 millones de dolares) usan el recurso de realizar proyecciones de prueba para saber que tan bien le puede ir a una cinta. Esta película en particular, y por tratarse de material bíbilico, se ha probado con audiencias Judias de Nueva York, Cristianas de Arizona y el resto de California (de acuerdo a THR).
Lo que ha preocupado al estudio es que a ese tipo específico de público no le ha gustado la película. Eso puede significar varias cosas, pero la primera que me llega es que les ha movido el tapete porque no esperaban que contaran así la clásica historia de Noé y su Arca.
Pero bueno, ahora dicen que se está poniendo en duda si Darren Aronofsky tendrá derecho de tener su corte final. Es decir, que él decida la película que el público verá. En lo particular solo puedo decir esto: si ya contrataste a Darren Aronofsky, disfruta el viaje porque es una película de Darren Aronofsky, no de Paramount, no de Russell Crowe, es del cineasta con la visión de transformar esta historia y darle un giro nuevo.
Me entusiasma la idea de que esta película comience a levantar polémica inclusive antes de que se estrene… Bien dicen que si los perros ladran es porque se está avanzando.
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