Pinche pandemia. Es una lástima que todo nos esté llevando a consumir servicios de streaming para ver películas nuevas. En la Ciudad de México se activó nuevamente el semáforo rojo y los cines están cerrados, lo cual significa que no podré ver estrenos como La Mujer Maravilla 1984… aunque dicen que es mala.
Pero… Lo bueno del asunto es que Disney+ ha lanzado Soul, una película que esperaba con muchas ansias, en parte porque el score está hecho por Trent Reznor y Atticus Ross, los genios detrás de la música de los filmes más recientes de Fincher (bueno, desde Red Social que tiene más de 10 años), y en parte porque Pete Docter es de los mejores directores con los que cuenta Pixar (Up, Intensamente).
En fin, vamos a lo que nos truje. La película la vi el mismo día que se publicó en Disney+, el 25 de diciembre. Buen regalo de Navidad para todos… pero sucedió lo inimaginable, mientras más avanzaba menos identificado me sentía con el filme, sus personajes o temática. Sentí que era un «curso intensivo» de «mindfulness» para la gente común que termina dando un mensaje de «vive la vida.» ¿Tan vacías están nuestras vidas como para decir que Soul es la mejor película de Pixar?
Es intachable la manufactura de las cintas de Pixar. Todo es hermoso, bien animado, iluminado, fotorrealista cuando necesita serlo. La música es increíble, maravillosa. Tienen un 10/10 en ejecución siempre… y la verdad es que eso ya lo saben todos sin necesidad de mencionarlo.
En cuanto a narrativa e historia, la cinta es una típica historia de Pixar al dedillo. En la película seguimos a Joe, un maestro de música de secundaria que ha vivido toda su vida de frustraciones y sueños rotos. Esto es hasta que uno de sus alumnos lo conecta con la famosa jazzista, Dorothea Williams, para que pase una audición y se integre al cuarteto… hace la audición de su vida y le dan el trabajo. La vida es maravillosa.
Pero entonces se cae por una cloaca y muere. Porque la vida es tan maravillosa como irónica. De ahí lo vemos en un viaje a través de las dimensiones abstractas de la muerte y la vida luchando por regresar a la Tierra y cumplir su sueño. Ahí la trama se complica, porque es un alma que debió de haberse ido al más allá y comienzan a buscarlo, se hace pasar por otra alma y… conoce a 22. Un alma que nunca ha estado lista para vivir en la Tierra. Ahí juntos se ayudarán mutuamente y caemos en lo típico de casi todo guion de Pixar: Los protagonistas no recibirán lo que quieren, sino lo que necesitan.
De pe a pa, la trama de Soul es de fórmula. Inclusive se ve venir el momento Pixar (prácticamente lo mismo que vimos en Coco), y no me hizo sentir nada, tal vez me estoy convirtiendo en una roca o…
Aquí va mi hipótesis: La mayor parte de la gente alrededor del mundo no vive sus vidas. Están atrapadas en una existencia que no las satisface y que tortura sus almas. Se han olvidado de que la vida es para vivirse, tener experiencias… inclusive si tienes que sufrir. La realidad es que la vida es 99% sufrimiento y 1% dicha, pero todos le sacan la vuelta a eso. Soul tiene una visión un tanto hipócrita de esto porque te muestra el mensaje feliz, pero sin experimentar lo amargo. Básicamente es la visión desde el privilegio de alguien que ha completado su pirámide de Maslow y solo va por la punta. ¿Qué hay del 99% del resto de la población que vive jodida? Oh, si… no puede pagar Disney+, así que nos valen madres.
Es fácil decir «Vive la vida» cuando no te hace falta nada. Pero para quienes están jodidos y apenas si tienen para comer… ¿Cuál es el punto?
Sé que sueno amargado, pero la realidad es que Soul terminó siendo para mi una buena película con un mensaje mediocre (que ojalá le sirva a quien tenga que servirle) y una visión con tintes rosas. Hipócrita en su haber con una muy buena ejecución. Me hace cuestionarme, ¿la vida se ha vuelto tan vacía como para que Pixar indique como deben de ser las cosas? ¿Vives una vida tan pinche vacía como para que te haga llorar el hecho de que un dibujo animado te lo tuvo que decir? Que jodido está todo el sistema si es así.
Algo que podría pasar desapercibido y que se me hizo genial en Soul es la no discriminación (no del protagonista, que claramente es discriminado y termina en el cuerpo de un gato), y me refiero a la pequeña cuestión del bien contra el mal. En el plano de las almas no existe y lo vemos con esa alma que se está preparando para ser un dictador en la tierra. Así hay también asesinos, cantantes, curas y torteros. El bien y el mal son una ilusión que viene sustentada por la moral de la gente. Y la extensión de la moral está sumamente bien delimitada: geografía y tiempo. Al final, la moral son las cadenas del actuar basada en la conveniencia social de quien la impone.
Para finalizar esto, Soul es una película que propone que nada de lo que hagas tiene relevancia, ni impacto. Lo vemos con 22, que fue tutelada por infinidad de almas «famosas» las cuales realmente no le hicieron cambiar su opinión con respecto a la encarnación. Al insertar la creencia de que «nada tiene relevancia, nada tiene impacto y hay que vivir la vida» lo único que se logra (obviamente desde mi perspectiva) es que la gente se quede con la falsa idea de que es más conveniente vivir por vivir, ser un robot y quedar a merced de quien se proponga explotarle. ¿Para qué pensar? Lo chingón es sentir y vivir la experiencia.
Si algo sé es que al poderoso le conviene siempre, mucho más, tener gente que no cuestione, viva y muera como animales, se crea irrelevante y sin propósito a gente que esté en equilibrio entre lo que piensa y siente… y que cuestione, que sea un agente de cambio. Pero bueno, al parecer Pixar te convenció de que no vives tu vida. Hay kleenex a la salida.