Si aun no has disfrutado las primeras dos películas entonces te recomiendo que lo hagas antes de que vayas a ver Star Trek: Sin Limites para que no pierdas el hilo en esta historia que finalmente desenlaza el viaje personal y espiritual del Capitán Kirk.
De hecho, creo que de cierta manera esto fue lo malo de esta tercera parte dirigida magistralmente por Justin Lin, porque lo que tiene de las anteriores lo utilizan solo para tratar de seguir manteniendo el estilo, dejando a un lado el mensaje que manejan ambas. Por esto debo decir que esta es la que menos me ha gustado de la trilogía.
Aunque tiene muy buenos momentos de humor y excelentes actuaciones como las anteriores (ademas de efectos visuales sorprendentes y un soundtrack épico), lo que le falta y lo que me hizo desear con mucha devoción, es una historia totalmente distinta.
Y es que siento que esta historia que contaron no esta muy bien pensada y que por lo tanto, no es lo mejor que pudieron haber hecho, lo cual es lamentable tomando en cuenta de que esta tercera parte debería ser como la ultima pieza que faltaba para que el Capitán Kirk (Chris Pine) respondiera la pregunta ¿Quien soy?
Aunque claro, esto no le quita el hecho de que Simon Pegg y Doug Jung hicieron un excelente trabajo con el screenplay manteniendo la linea de las anteriores. Sin embargo, debido al problema de raíz que tiene esta historia, para mi la trama resulto a veces lenta y poco creíble.
Tomemos la idea principal del filme: en un viaje de cinco años, la U.S.S. Enterprise se pierde en un planeta inhóspito luego de ser atacada por un enemigo desconocido y peligroso. Digo, suena bien, pero finalmente no lo es porque la ejecución no es la adecuada.
Es por eso que en lo personal considero que el arriesgarse a contar esta historia para desarrollar la trama bajo esa premisa resulta a decir verdad, en algo absurdo y poco elocuente para dar a conocer ese ultimo paso que da Kirk para cobrarle sentido a su vida.
Dicho lo anterior, debo decir que tengo el presentimiento de que no le dieron suficiente tiempo e interés para pensar a profundidad como manejar este mensaje.
Por otro lado, es lamentable también que no hayan tomado en cuenta la evolución y cambios de mentalidad que sufre Spock (Zachary Quinto) en las películas anteriores, puesto que en esta tercera parte toma una actitud inverosímil teniendo unos motivos para hacer que avance la trama bastante absurdos.
Finalmente hablando un poco de Sofia Boutella y su papel como Jaylah, quiero decir que es buena su interpretación y esta padre su caracterización, aunque de igual forma como parte de este que pareciera ser un complot en contra de la franquicia resulta ser tan vital e importante para la historia, que llega a ser como una distracción de lo que debería estar sucediendo realmente.
Pero bueno, en general Star Trek: Sin Limites es una buena película en el sentido de que te entretiene y te hace pensar sobre la importancia de nuestras acciones. Aun con eso, para mi no es la mejor de la saga.
Para mi gusto personal yo me quedaría con la primera parte; ahí donde se plasma de manera genial como un chavo imprudente y enojado con la vida, puede usar su incomprensión para ayudar a los demás formando parte del U.S.S Enterprise.
