Este año ha estado bastante pinche en cuanto a estrenos. Todo porque a alguien se le ocurrió que era buena idea comer sopa de vampiro… en fin, apenas hace algunas semanas se reabrieron los cines y finalmente decidieron estrenar Tenet en México, cosa que me puso feliz.
No hay otra forma de ver Tenet si no es en una pantalla IMAX (bueno, hay muchas, pero la realidad es que en su corrida para cines lo mejor es optar por ese formato). La cinematografía de Hoyte Van Hoytema y todas las partes que se filmaron en ese formato bien lo valen. Es una película tan espectacular como inteligente… aquí ojo: inteligente no intelectual. De hecho el gran problema con lo «intelectual» es que apela al público más mamón y pretencioso que puede existir, del tipo que inclusive cree que Tarkovsky es sumamente «comercial.»
Pero bueno, esos mamones que se queden con sus cosas pretenciosas que solo han visto tres personas y un perro que se coló a la sala de cine. Aquí con Tenet estamos hablando del más reciente espectáculo de Christopher Nolan, un cineasta que ha hecho películas increíbles y que la verdad no me canso de ver porque siempre dice algo nuevo. Con este filme me parece que alcanza un nuevo nivel en cuanto a ejecución técnica de su realización y también en la manera en la que cuenta sus historias.
Tenet es un film que debe de ser disfrutado sin spoilers por lo que solo diré que la historia sigue a John David Washington, un agente secreto que se ve envuelto en una aventura llena de acción y complicaciones temporales sumamente intrincadas. Hay ciencia, pseudociencia y todo lo que está en medio de eso… mucha imaginación.
A mucha gente se le ha hecho complicada la mecánica que maneja la película, pero realmente es la clásica historia contada en tres actos. El clásico viaje del héroe que tanto conocemos pero con un twist (o loop) temporal que ayuda a que la trama siga avanzando y que nosotros como público conozcamos más a detalle el mundo en el que se desarrollan los hechos… la verdad es que Nolan solo deja que veamos un poco de la superficie, pero hay mucho que contar en toda esta red de hechos.
El elenco es excelente. Destaca la mancuerna entre John David Washington y Robert Pattinson que logran una química excelente en pantalla. Son básicamente aliados naturales en este thriller de altos riesgos y consecuencias. También hay que señalar a Kenneth Branagh que da una muy buena actuación y que pone a parir chayotes a todos, incluyendo a la espectacular Elizabeth Debicki.
Todo lo que se ve en pantalla es sumamente natural aunque haya sido fríamente calculado. Esto lo digo porque hay secuencias de acción y peleas que parecen totalmente reales aunque vayan en reversa y el mundo se voltee. Está increíble y solo con recordar todas esas escenas sonrío.
Tenet es una gran película. Está sumamente cuidada y pulida a nivel técnico y actoral. Christopher Nolan se encargó de escribir el guion y de dirigir… además de obtener un presupuesto muy alto para poder rodar su visión y obtener lo que vemos en pantalla. Vale muchísimo la pena ver esta cinta y es una pena que se haya tenido que estrenar bajo estar circunstancias tan horribles y distópicas. Puta pandemia.
¿Vale la pena ir al cine? Pues… la cinta la vi en IMAX. Sigue habiendo 25 minutos de comerciales previos a las funciones. La dulcería es extremadamente cara (dos paquetes de M&Ms y un refresco cuestan $150). Y el trato es exactamente igual que previo a pandemia. Lo único distinto es que la mayor parte de los asientos están marcados como no disponibles y al finalizar la función te piden que salgas de manera ordenada, fila por fila, siempre manteniendo una sana distancia… cosa que en teoría siempre había sido. Así que… ¿vale la pena? Ir al cine siempre ha valido la pena y más con una película como Tenet. Pero la realidad es que las cadenas de cines se tienen que poner las pilas porque hoy por hoy sus pantallas pierden contra cualquier otra. Hay más gente jugando Among Us o Fortnite que yendo al cine a ver películas… y eso es todo un problema en si mismo.